ayMamachita

Circo, maroma y teatro...

Desde los elefantes de Lapuente, el payaso saltarin que invadio la cancha con su alegria y desfachatez, el mago del balon: Adolfo el Bofo Bautista, el malavarista de la gambeta el Venado Medina, la carpa roja, blanca y azul que cubrió la tribuna, el pueblo feliz y rebosante que se deleita con el espectaculo, este es circo del clasico.


Unos dicen que el clasico esta muerto, lo dicen porque estan fuera de las dos grandes aficiones de este país, la del Rebaño o la de las Aguilas.
Pero basta con verle la felicidad dibujada en el rostro chiva, toda la semana, y basta con ver la verguenza posterior al partido con que los cremas sufriran esta semana.


Un equipo no salio a jugar. Salio al estilo Lapuentista, con dos entrenadores llamados Tena que tienen la mejor delantera de este pais: en la banca =S, salieron timoratos y con un equipo que deseaba el 0-0, proposito inconcebible para un equipo grande. Parecian un equipo ratonero, canchero y puntista.
Todo lo contrario a la ideologia Aguila.
Pero bueno ese error lo tendran que tragar sin masticar.

Por el lado tapatio los Domadores del circo aparecieron, buscaron el arco enemigo desde la primera mitad, y despues de un tiempo y unos minutos mas lograron al fin abrir la concha, con dos tiros que nuestros mejores arqueros partieron dos veces la manzana de Ochoa.

En caso inusual en el Circo, Bofo pone la muestra de la acrobacia, y Medina la repite al minuto siguiente, dos golazos que dejaron mudos a la barra amarilla, y dos golazos que destruyeron las gargantas chivas por tanto fluido de felicidad que se derramaba en gritos.

El Rebaño domó a las Aguilas a placer, y la bestia en ningun momento enseño las garras, guardadas, enfundas en esos pants de calentamiento, que los Tena por ordenes de Manuel dejaron fuera de la contienda.

Entro Vuoso y Cuauh, pero sin ritmo, sin tiempo, sin balon, y sin equipo para ir al frente, fue entonces tomado el equipo amarillo envuelto en su traje de luces y metido con un derechazo del Bofo al cañon para usarlos como bala humana, y Alberto con el zurdazo los disparó fuera del Jalisco.


ya nomas la caminera:
No estaba el dueño del circo, pero se quedaron los que tenian que dar el espectaculo.